Los videos vejatorios se propagaron a más de 13 sitios web de contenido para adultos. Las autoridades no logran localizar a todos los titulares y el caso sigue abierto
Los hechos se remontan al 2019 cuando un “voyeur electrónico” grabó con una cámara oculta a distintas mujeres orinando en la calle. Eran las fiestas de la Romería en San Cibrao (Galicia). Las imágenes se publicaron en la red y en pocos días dieron la vuelta al mundo evidenciando la falta de privacidad que existe en Internet.
Desde ese momento las mujeres de Maruxaina empezaron un largo periplo. Presentaron una denuncia ante la Guardia Civil, cuerpo que intentó gestionar el conflicto retirando algunos de estos videos. Sin embargo, no fue suficiente dado el elevado número de sitios web que difunden el material sensible.
Fue entonces cuando 21 de las 87 afectadas iniciaron un procedimiento en el Juzgado de Instrucción Número 1 de Viveiro. Las víctimas aportaron información sobre más de 13 sitios web además de pistas sobre los posibles autores. Se cree que instalaron hasta 3 cámaras diferentes en la rueda de un coche en un punto muy cercano al que se ubicaban las mujeres.
El Juez dictó que no había delito ya que los vídeos habían sido grabados en la vía pública y no suponían un agravio contra la integridad moral. Esta polémica decisión provocó la indignación de centenares de vecinos que se manifestaron en la vía pública en apoyo a las víctimas.
En el 2021 en un proceso de apelación la Audiencia Provincial de Lugo se mostró más favorable. Estos nuevos jueces consideraron que podría existir la comisión de un delito contra la intimidad. Además, parte de las víctimas son menores de edad y algunas han recibido tratamiento psicológico.
Meses más tarde entro en escena la AEPD (Agencia Española de Protección de Datos). Entre sus funciones más importantes está la de proteger los datos de los españoles). La agencia inició un expediente de notificaciones, pero al parecer no fue posible contactar e identificar a la totalidad de sitios web. Esta circunstancia ha llevado a que algunos de los contenidos aún sigan publicados a fecha de hoy.
Las afectadas han puesto en marcha una campaña en redes sociales llamada Xustiza Maruxaina y siguen denunciando su situación de indefensión ante estas malas prácticas.