Los investigadores analizaron el vehículo y constataron que tenía instalado un artilugio de seguimiento GPS
La Guardia Civil ha dado a conocer la operación “SIGOTE” que pone en evidencia el uso de apps y dispositivos para el espionaje conyugal en España.
El operativo se inició en Picanya (Valencia) cuando una mujer presentó una denuncia por un supuesto delito de violencia de género. La denunciante afirmó que mantuvo una relación sentimental con un hombre de Madrid. Ambos convivieron juntos hasta que la relación se deterioró y empezaron las amenazas.
Las sospechas de ciber espionaje ilícito empezaron cuando ella coincidía en lugares en los que no había planeado desplazarse y donde él intentaba convencerla para que retomara la relación. La mujer presentó una denuncia cuando sorprendió al acusado manipulando los bajos de su vehículo. Tras una inspección la Guardia Civil pudo constatar que tenía instalado un dispositivo de seguimiento que permitía geolocalizarla en el mapa.
El hombre de 54 años fue detenido por un delito de malos tratos en el ámbito familiar (acoso continuado) y también su amigo, un varón de 62 años por delitos de usurpación de estado civil y falsedad documental.
La persecución jurídica y policial no es nueva: en Badajoz un hombre de 50 años fue detenido tras comprobarse que instaló más de 15 aplicaciones en el móvil de su esposa. En Andalucía, un hombre ha sido condenado a un año de prisión por amenazar a su pareja a través de las redes sociales.
Las diligencias han sido tramitadas en el Juzgado de Violencia de la Mujer Número 1 de Torrente y el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción.
La ciber violencia de género es un problema emergente. En la red existe un mercado subterráneo de empresas que facilitan software para recibir copias de WhatsApp; geolocalizar al cónyuge o acceder a su correo electrónico. Son aplicaciones de rastreo y registro de llamadas, cada vez más accesibles y sujetas a pocos filtros.
¿Qué puede ser considerado ciber violencia de género?
– Monitorizar el comportamiento de la pareja o ex pareja en sus redes sociales.
– Pedir explicaciones por sus conversaciones en espacios digitales.
– Reprochar su comportamiento al publicar fotos o determinados contenidos.
– Utilizar virus troyanos o software ilícito para espiar, monitorizar sus movimientos.
– Exigir que tu pareja muestre su geolocalización.
– Chequear repetidamente su WhatsApp para comprobar su estado y última conexión.
– Exigir visualizar sus mensajes de WhatsApp o sus e-mails.
¿Cuál es la sintomatología de un terminal intervenido por su ex pareja?
– Sobrecalentamiento del terminal
– Apps que no funcionan correctamente
– Encendido involuntario del GPS
– Baterías que se agotan rápidamente
– Coincidencias extrañas con la ex pareja en distintos espacios públicos
– Autoborrado de mensajes
– Surgen barras de herramientas en el navegador
– Archivos que no se pueden eliminar y que podrían contener un virus
– Alto consumo del procesador CPU