Distintos eventos sirven para reclutar a expertos y organizar la lucha contra el cibercrimen global
El auge de la moderna ciberdelincuencia lleva aparejada un aumento de los efectivos públicos contra el delito digital. En nuestro país existe un amplio abanico de brigadas de investigación tecnológica, empresas de ciberseguridad y organismos públicos con competencias en la materia.
En España el CNI y el Centro Criptológico Nacional llevan a cabo acciones contra el cibercrimen, así como el INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad).
El ejército español también se ha blindado contra el cibercrimen. El BOE reconoce el “ciberespacio” como una dimensión más a proteger y preservar. Figuras como el ciberagente, el ciberespía o el investigador online ya se han instaurado en nuestro país donde existen numerosos profesionales dedicados a investigar que es lo que ocurre en el otro lado de la pantalla de plasma.
Pero estos recursos no siempre son suficientes ya que el cibercrimen siempre va por delante y necesita de nuevos profesionales. A este efecto existen los eventos tecnológicos o también conocidos como ciberligas tecnológicas. En ellos se promueve la cultura de la seguridad al mismo tiempo que se detecta al talento y se atrae a nuevos perfiles de expertos.
La Guardia Civil organiza la National Cyberleague. Sus participantes tienen que enfrentarse a retos técnicos, solucionar problemas informáticos o descubrir vulnerabilidades. Todo en una competición en la que existe un jurado que otorga premios y puntúa a equipos.
El INCIBE organiza el Encuentro Internacional de Seguridad de la Información el Cybercamp ULPGC o la policía el C1b3rwall. Estas competiciones reúnen bajo un mismo techo a centenares de personas con habilidades digitales. Entre sus concursantes encontramos a funcionarios del Estado, pero también a universitarios, programadores, peritos informáticos y hasta detectives privados.
Los eventos sirven de punto de encuentro entre el sector público y privado. Tienen sus propios perfiladores y expertos en detección del talento. Existen profesionales especializados en cyberprofiling (trabajos de perfilación), pero también en ciberseguridad, ciberguerra, seguridad informática, ransomware, ciberviolencia de género o defensa de infraestructuras críticas.
No existe un prototipo medio del experto en cibercrimen asegura el Observatorio Español de Internet. Se trata de personas que pueden proceder de la ciberseguridad, las ciencias criminológicas o la investigación privada. Y como no, tampoco faltan “listillos de la informática” ciudadanos con habilidades avanzadas en el manejo de herramientas informáticas.