Fraudes phishing, estafas Bizum, engaños en alquileres vacacionales y free Wifis entre las cibertrampas más rentables para los ciberdelincuentes afirma Kaspersky
Entramos en época prevacacional, un periodo en el que muchos viajeros esperan encontrar una “oferta de oro” y cerrar su booking. La intención de compra se dispara en junio y julio hasta el punto de que el 35% de los españoles ya contratan sus viajes en Internet. Son los momentos más críticos del año y con mayor actividad compradora en webs de productos vacacionales afirma Kaspersky.
El 20% de los usuarios elegirá destinos vacacionales influenciados por lo que han visto en las redes sociales. Se estima que cada año se realizan más de 148 millones de reservas relacionadas con productos turísticos. Según Statista Global Consumer los sitios web con más demanda son Booking.com (70%), Airbnb (23%) y Trivago (16%).
Los ciberdelincuentes saben cómo captar a clientes con precios muy bajos. Actúan como organizaciones criminales bien preparadas. Publican miles de anuncios con falsas ofertas, clonan páginas de agencias de viajes y organizan sorteos engañosos con phishing.
Según Kaspersky, los fraudes en alquileres vacacionales constituyen un fraude clásico. Los estafadores acuden a webs especializadas en reservas donde publican anuncios engañosos con fotos robadas. Ofertan apartamentos dirigidos a viajeros ingenuos en busca de una oferta irrechazable. Tras una breve conversación el ofertante solicita el envío de una paga y señal en concepto de reserva por un apartamento que en realidad no existe.
Con el cybersquatting los ciberdelincuentes registran un nombre de dominio muy similar al del hotel o agencia original. Inducen a confusión al comprador quien realiza el booking en un sitio web clonado.
Los free wifi’s constituyen otro riesgo preveraniego. Con la llegada del buen tiempo los usuarios pasan más tiempo al aire libre donde utilizan conexiones gratuitas en parques, espacios públicos y aeropuertos. El delincuente crea otra red WiFi con el mismo nombre que la oficial, logrando que la víctima se conecte al lugar erróneo enviando así todos sus datos.
Otros ciberdelincuentes entran en la sesión abierta de un usuario que ha visitado páginas como Booking o Airbnb. Cambian el correo electrónico lo cual dificulta que el usuario la pueda recuperar. Logran el control de la cuenta y transfieren puntos o millas o la utilizan para realizar compras ilícitas.
Tampoco faltan miles de mensajes fraudulentos phishing. Kaspersky asegura que se intenta llevar a los usuarios de la red a páginas que simulan sitios de reservas. Se les convence para llenar formularios en línea mediante enlaces fraudulentos que simulan promociones o sorteos. Finalmente se roba sus credenciales de acceso bancario o los códigos de reserva a un vuelo.
La llegada del buen tiempo también está asociada a un mayor consumo de apps vinculadoras de oferta y demanda sentimental. Los usuarios pueden ser ciberextorsionados por delincuentes especializados en captar imágenes explícitas de desnudos sus víctimas. Los estafadores del amor crean perfiles falsos y generan estrategias de confianza a largo plazo.
Entre los timos más modernos figuran los modernos Bizum. Los delincuentes envían un WhatsApp a la víctima suplantando la identidad de un ser querido. Se convence al incauto para que haga un Bizum haciéndole creer que transfiere un fondo para ayudar a un familiar en apuros.
Decálogo de consejos
Desconfíe de sitios web que te exijan un pago por adelantado, así como aquellos propietarios de apartamentos vacacionales que aseguren estar en el extranjero.
Compruebe la identidad del anunciante y desconfíe si le ofrece terminar la transacción en una plataforma distinta a la que le ha conocido.
Desconfíe de anuncios con faltas de ortografía o mal redactados y use únicamente plataformas de confianza.
Desconfíe de quien tenga prisa por cerrar el trato y guarde capturas de pantalla de todas las conversaciones.
Bloquee su dispositivo con un código de acceso, no se conecte a una red free Wifi sino está seguro que se trata de una fuente oficial. Evite consultar sus extractos bancarios desde ordenadores de acceso público (cibercafés, aeropuertos, hoteles).
